Un viernes por la mañana él estaba muy dormido. En ese momento entró un ladrón al colectivo y le pidió todo el dinero que tenía. Lo apuntó con un arma de fuego, peró él siguió resistiéndose; no quería darle su plata. Tiki-Wiki, a escondidas, estaba llamando a la policía. Mientras tanto, le imploraba:
- ¡No, por favor, no me mates!
- Te voy a matar si no me das el dinero -, lo amenazaba.
De repente, apareció la policía. Con su megáfono gritaron:
- ¡Bajen del colectivo!
Como no respondían, los policías rompieron la puerta de adelante. Pudieron apresar al ladrón. Lo metieron a la cárcel. Afortunadamente, el colectivero se fue a su casa tranquilo y en paz.
FIN
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